Improvisando vs. el narco.

Publicado el 9 ENE 2009.

Soldados al vapor… desgaste y deserciones en Marina con el PAN

JORGE ALEJANDRO MEDELLÍN

Nuestros soldados hacen lo que pueden con lo que tienen, y en el último de los casos lo único que les queda es el compromiso con su país.

En el peor, son el hambre, la falta de empleo, la casi nula educación, el destino marcado por la raíz mayoritariamente indígena y el abuso de sus jefes superiores.

Los sueldos siguen siendo bajos, lo dice y reconoce el alto mando. Su preparación no es ni con mucho la deseada y las herramientas de las que están dotados son caducas, precarias, endebles si se les enfrentara a otra fuerza armada. Lo reconoce también el alto mando.

Sin embargo, para muchos el esfuerzo es más que notable, sobre todo si se toma en cuenta el nivel de preparación que se les da. Dice el alto mando en el documento que ya hemos venido comentando, que el ciclo de adiestramiento básico individual es de ocho semanas y el especializado es de 13.

La unidad básica de operaciones en el Ejército Mexicano es el pelotón, formado por “10 o más elementos”, según la Sedena. Su preparación toma 75 días. A ese lapso se suman después los “45 días de adiestramiento de armas y unidades de vuelo combinadas y operaciones conjuntas”, señala la dependencia.

En total, dice el análisis de la Defensa Nacional, “su adiestramiento anual comprende sólo 120 días; en los ejércitos de la mayor parte de los países, este es permanente (sic)”, acepta la institución que recibió en mando hace dos años el general Guillermo Galván Galván.

Los datos de la Sedena sobre la preparación de nuestras tropas son prolijos y contundentes: los cursos básicos de formación de Sargentos duran en promedio 16 meses.

Una vez completada esa parte de la ruta, viene lo más difícil.
Dice además la Sedena que la formación de un Sargento Primero de nivel profesional toma alrededor de 10 años, pero “a lo largo de su carrera logran la jerarquía solamente 1 de cada 160 elementos (sic)”.

Los Sargentos Primeros tiene también la opción de ingresar al Curso de Formación de Oficiales en el Heróico Colegio Militar. El curso dura un año pero… "solamente uno de cada siete logran este propósito”, añade el documento.

Hasta aquí es más que entendible el difícil entorno del soldado mexicano. Las palabras “deserción”, “moral”, “disciplina”, “orden” y “compromiso”, o si se quiere “honor”, “valor”, “lealtad”, comienzan a adquirir otro sentido.

Añade la Sedena que la tropa sigue percibiendo malos salarios, menores que los de un policía raso del Distrito Federal, que son de 8 mil pesos, o de uno Federal, que es de 8 mil 700 pesos.

¿Es necesario agregar más?

A PIQUE CON LOS GOBIERNOS PANISTAS

Los primeros dos años del sexenio del presidente Felipe Calderón se convirtieron en el periodo en el que históricamente han desertado más pilotos aeronavales, esto en una visión retrospectiva de la última década, en la que la Marina ha perdido un total de 35 pilotos.

Datos de la Armada de México proporcionados a este diario mediante la Ley Federal de Acceso a la Información, indican que en los últimos 10 años, ocho pilotos han desertado de la institución mientras que 27 han solicitado y obtenido su baja por diversos motivos.

Actualmente la Marina cuenta con alrededor de 300 pilotos (140 tripulaciones) para sus 182 aparatos, de los cuales la mayoría se mantiene en operación.

Entre desertores y personal de baja voluntaria, la Marina tiene un nivel bajo de pérdidas comparado con lo que ocurre en la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), en donde se ha registrado en los últimos diez años la deserción de 201 pilotos y la solicitud de baja de 179, para un total de 380 elementos.

En comparación, las cifras de la Marina representan casi el 10 por ciento del total de bajas y deserciones en la Fuerza Aérea.

Sin embargo, de ese universo de pérdidas navales por solicitud de baja, más de la mitad (16 de los 27 casos) ocurrieron en este sexenio.

Diez solicitudes de baja se registraron en 2007 y otras seis en 2008. En 2006, en el sexenio panista de Vicente Fox, hubo siete solicitudes de baja y se registraron cuatro de las ocho deserciones reconocidas por la Marina.

En cuanto a los años en los que se produjeron las deserciones, la Marina informó que en 1998 hubo dos; en los siguientes años, hasta el 2001, hubo una por año, en tanto que de 2002 a 2004 no hubo deserciones.

En 2004, 2005 y 2006, los últimos del sexenio de Vicente Fox, se registraron tres deserciones (una por año). Con Felipe Calderón sólo se ha registrado una deserción, indica la Armada.

En cambio, las bajas de pilotos originadas por solicitudes hechas de manera oficial se dispararon en el primer año del actual sexenio. En 1998 y 1999 no hubo bajas. En 2000 se registró una. En 2004 y 2005 hubo una baja por año, pero en 2006 hubo siete, lo que más del doble (3) de las registradas entre 1998 y 2005.

CENTINELA…
Uno.- El Ejército esta cerca de detener a tres de los responsables de la decapitación de siete soldados y un capitán ocurrida hace casi un mes en Chilpancingo.
Las pistas proporcionadas por civiles detenidos y policías interrogados en Guerrero están a punto de cerrar la pinza sobre los ejecutores.

Dos.- Fue la Sedena la responsable de reunir los datos de inteligencia y procesarlos para detener a Miguel Ángel Soto Parra, uno de los elementos más jóvenes de los Zetas originales, detenido por la PGR en una colonia del sur del Distrito Federal.
El seguimiento del Ejército y la presión sobre Soto Parra tomó tres meses, hasta que fue acorralado. Las escuchas telefónicas y la infiltración están dando frutos.

Tres.- Sedena y Marina comenzaron a ejercer presión sobre legisladores panistas a fin de obtener concesiones económicas inmediatas derivadas de su papel en la lucha antidrogas.
Los altos mandos buscan más dinero para combatir a los cárteles mediante la expropiación inmediata de su dinero, bienes, armas y equipo.

Saben que el esfuerzo del gobierno federal se ira reduciendo poco a poco en la medida que avance el año electoral y el tema de las campañas borre al del combate al crimen.

No se equivocan.