Publicado el 3 NOV 2008.

Las heridas en Sedena...Reformas al ISSFAM, para evitar más deserciones.

JORGE ALEJANDRO MEDELLÍN

La historia detrás de la detención de cinco elementos del Ejército Mexicano en enero de este año, luego de la captura en Sinaloa de Alfredo Beltrán Leyva, “El Mochomo”, apenas comienza.

El proceso en su contra lleva nueve meses y en el han aparecido otros nombres de militares, agentes federales, policías municipales y algunos civiles involucrados en una de las tantas redes de penetración del narco en instituciones federales.

De nuevo y a regañadientes, el Ejército y la PGR investigan las historias que les han contado en el penal de La Mojonera, en Jalisco, los militares capturados, para saber si la lista de tan solo cinco efectivos castrenses crece en las próximas semanas.

De ahí el optimismo del subsecretario de la Defensa Nacional, general Francisco Meza Castro, al asegurar que no hay nadie más que esté manchado con dinero o complicidades del narco por lo menos en Sinaloa.

En el 2002, la Sedena enfrentó otros escenarios de presunta penetración del narco en sus filas al conocerse la desmovilización del 63 Batallón de Infantería en Guamuchil, Sinaloa, cuyos oficiales y tropa evitaban operativos de vigilancia y erradicación en determinadas zonas de la sierra.

En la causa penal que se instruyó en contra de varios integrantes del batallón aparecieron nombre de capitanes, tenientes y coroneles e incluso el de un general al que supuestamente se ligaba a las acciones de corrupción detectadas en Guamuchil.

En ese expediente surgió el nombre de Alfredo Beltrán Leyva, “El Mochomo”, como el de un narcotraficante local que, entre otras cosas, le habría enseñado al entonces comandante del 65 Batallón a pilotear avionetas los fines de semana.

El batallón fue detenido, enviado el Distrito Federal y desarticulado. De los más de 100 elementos interrogados, sólo se procedió en contra de ocho.

Las denuncias y señalamientos de la tropa y de oficiales hacia el general, dos coroneles, dos capitanes y varios tenientes se esfumaron en el aire.

Al menos tres mandos desertaron y no se volvió a saber de ellos. ¿Hasta dónde y para qué le alcanza a la Sedena el “blindaje” antinarco?

El recuento de los daños en el Ejército pasa hoy por filtraciones sobre identidad, ubicación, logística y cobertura de policías, militares y civiles involucrados en la lucha antinarco en el norte del país, especialmente en Sinaloa.

Por lo menos hasta el mes de 577'>julio de este año, sumaban las ejecuciones (entre civiles, policías y militares) en ese estado.

Las filtraciones de información sobre operativos exitosos y quiénes los realizaron, para cobrar venganza, constituyen tan solo unos los frentes abiertos entre cárteles y militares. La historia no va ni a la mitad.

UN PASO ADELANTE, TRES ATRÁS.
El Senado de la República aprobó la minuta que contiene las reformas a la Ley del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas Mexicanas (ISSFAM), cuyos cambios tienen en el fondo un objetivo preciso: contribuir a "disminuir las deserciones que han aquejado en los últimos años a nuestras fuerzas armadas", según se señala en el dictamen de la minuta elaborado en el Senado.

El texto fue revisado desde al pasado lunes por las comisiones de Defensa, Estudios Legislativos y Hacienda del Senado de la República luego de haberles sido enviado por los diputados para que estos hicieran las modificaciones que consideraran pertinentes.

De manera unánime y sin modificaciones, la minuta fue aprobada por los senadores y regresada a los diputados, conteniendo en lo fundamental los siguientes aspectos:

--Redefinir aspectos semánticos en las definiciones que establece la ley, como en el concepto "sueldo base de servidor público", y el cambio de la palabra "inutilidad" por el de "incapacidad", evitando la idea de discriminación o de falta de respeto a la dignidad de la persona.

--Incrementar del 11% al 15%, la cantidad que aporta el gobierno federal para la prestación del servicio medico y otras prestaciones, como son centros de bienestar infantil, becas y créditos de capacitación.

--Incrementar el porcentaje del 70 al 80% que se aplica al haber que sirve de base para calcular el haber de retiro y la compensación.

--Incrementar del 60% al 90%, con base en una tabla progresiva por años de servicio que va de los 30 a los 45 años, la cantidad que se adiciona al haber del grado que se toma como base para calcular el haber de retiro y la pensión, respectivamente.

Además, se modificó el artículo 226 de la ley del ISSFAM en el que se ordenaba la baja inmediata de los militares a quienes se les hubiera comprobado haber sido contagiados del virus del VIH, debido a que una vez desarrollada la enfermedad ésta no se curaba en un lapso mínimo de seis meses.

Este artículo clasificaba a los infectados de VIH como personal con "inutilidad" para el servicio de las armas.

Lo anterior motivó, desde el año 2003, diversos recursos de amparo interpuestos por militares infectados de VIH para que se les reinstalara en sus lugares de trabajo y para seguir gozando de los derechos que garantiza la ley al personal del Ejército y Fuerza Aérea.

Las modificaciones a la Ley del ISSFAM aprobadas suprimen la palabra "inutilidad" por la de "incapacidad" y cambian el concepto hacia los militares infectados para evitar la discriminación.

CENTINELA…
Uno.- He aquí una denuncia-comentario sobre la otra realidad de los militares que buscan apoyo de la institución para salir adelante y acaban encontrando cosas como esta:

"Continuando con las quejas, que le parece tener que esperar 10 o 13 años, según sea el caso, de procedencia civil o militar, para poder ESCUCHE BIEN "PARA TAN SOLO SOLICITAR PRESTAMO HIPOTECARIO" sin contar que las cantidades son irrisorias.

Y quisiera me ayudara para localizar un lugar en este país donde pueda comprar una casa con toda la bola de requisitos que pide el ISSFAM de $220 mil para oficiales y $170mil para el personal de tropa.

Pero esa solicitud no te la contestan ni autorizan en 5 días tarda como la mía que ya va a cumplir 6 años te puedes imaginar como estamos los que no somos funcionarios públicos dentro de la SEDENA".

Dos.- Las versiones sobre el delicado de salud del ex secretario de la Defensa Nacional, el general Clemente Vega García, dicen que éste sigue viviendo en Chihuahua, en donde es atendido en instalaciones militares de varios problemas. Uno de ellos al parecer le ha hecho perder la vista en un ojo.

Tres.- El secretario de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván Galván, sigue atado de manos en su intento de limpiar el terreno, a nivel federal, para lo que sus asesores consideran debería ser la correcta aplicación de la estrategia anticrimen en el país.

Los consejos e iniciativas proyectadas por los militares en hacia Los Pinos volvieron a quedarse en el aire ante una coyuntura desfavorable y el segundo o tercer aire del hombre fuerte de Felipe Calderón.